Revista teatros

Aunque llegó a esto de la interpretación casi de rebote, no ha parado de trabajar. Inolvidable, su trabajo en “Los amantes del Círculo Polar” de Julio Médem. También ha hecho televisión y teatro.

Artaud busca ir más allá con el teatro de la crueldad. ¿En qué se nota?  

No se nota en el texto, se notará en el montaje porque estamos intentando ser fieles al manifiesto que escribió donde expresaba cómo creía que había que hacer el teatro, que era un modo no naturalista, sino más expresionista, más al alma.  

Interpreta a Lucrecia, ¿cómo es? 

 Es la segunda mujer de Cenci y madrastra de Beatriz. Es una mujer maltratada desde que se casa, una mujer frágil, llorada, asustada y que ha decidido sobrevivir a base de pastillas y apoyándose muchísimo en el amor de su hija.   

Muchas mujeres en pleno siglo XXI siguen siendo maltratadas. ¿Lucrecia reaccionaría hoy como entonces?

Quiero pensar que no. Aunque muchas mujeres no consiguen escapar del maltrato hoy, ahora tienen información, apoyo y, sobre todo, la comprensión de la sociedad y de la parte masculina. Ellas no tenían ninguna posibilidad, entonces las mujeres no existían, no tenían ningún derecho.